El Instituto Nacional de Geriatría (INGER) publicó una estrategia para prevenir la transmisión de Covid-19 en residencias de adultos mayores, quienes representan el grupo etario con mayor riesgo de complicaciones en caso de contraer el virus.
Mediante un boletín, el INGER detalló que entre los señalamientos se encuentran el constante monitoreo de los residentes y personal en busca de fiebre y síntomas respiratorios.
En caso de que deban salir de su habitación o establecimiento para revisiones médicas, el instituto recomienda el uso de mascarilla o cubre bocas, los cuales deben ser cambiados cada cuatro horas y cada vez que se hayan quitado.
Agregó que si hay un adulto mayor infectado, se deben colocar letreros en la puerta o pared afuera de la habitación que describan el tipo de precauciones necesarias, así como el equipo de protección personal requerido.
Los insumos que toda residencia debe proporcionar son las máscaras faciales; poner afuera de la habitación protección para los ojos, batas y guantes. También un bote de basura cerca de la salida dentro de la habitación del adulto infectado para que el personal pueda desechar el equipo de protección.
En el documento, realizado en concordancia con lo establecido por la Dirección General de Epidemiología, indicó que las residencias deben informar cualquier posible caso sospechoso de Covid-19 a la Unidad de Inteligencia Epidemiológica y Sanitaria de México.